Después de que un joven turista chino dejara su nombre grabado en el templo egipcio de Luxor, el Departamento de Moralidad del Partido Comunista ha decidido elaborar un documento en el que se indica a los ciudadanoscómo deben comportarse cuando se encuentren en el exterior. Uno de los objetivos principales de estos consejos es evitar que los viajeros repitan costumbres muy arraigadas en China como escupir en la calle, saltarse las colas, hablar en voz alta en los museos e incluso cortarse las uñas en público.